Hola a todas y a
todos,
Contento de
participar en este blog y así poder, vaciar, gritar o simplemente compartir ideas,
informaciones o bien, elucubraciones mentales debidas a la situación actual de
nuestro querido planeta Tierra, y de nuestros nunca bien ponderados individuos ¿seres
humanos?, que la manipulan, controlan, destruyen, torturan y que cada uno ponga
algún sinónimo más.
Si bien es cierto,
no estoy muy al corriente de la política o del estado general del pueblo
español, debido a mi ausencia de la península ibérica desde hace ya casi 20
años. « Desterrado » en la Galia, estoy más al tanto por el
movimiento político-social de este, mi nuevo país.
A pesar de todo,
los problemas que hoy tenemos, en este lado del planeta, son muy similares y sin
generalizar la raíz en de la enfermedad de
nuestras economías, situaciones sociales
y problemas que nos encontramos en tanto que individuos, ciudadanos o simplemente
un número más, que paga religiosamente sus impuestos para que estos seres
perfectos del cielo puedan seguir jugando a ser dioses omnipotentes con
nosotros los que vivimos en el “Paraíso” NO FISCAL, es la misma.
El otro día escuché
en la radio, a un economista que de una forma un tanto irónica y pedagógica,
explicaba como se estaba tratando de arreglar las deudas de los países con un
ejemplo muy sencillo que os voy a contar:
Un comercial
llega a un pueblecito perdido en un país de la Comunidad ECONÓMICA Burroeuropea,
llega al hotel del pueblo y pide una habitación por una noche. El recepcionista
le da la llave y le pide 100€. El comercial le da los 100€ y acto seguido el
recepcionista llama al carnicero del pueblo para decirle que puede pasar cuando
quiera para recuperar los 100€ que le debe del último pedido realizado por el
hotel.
El carnicero a la
salida del hotel, con sus 100€, llama a la prostituta del pueblo para decirle
que va a pasar para pagarle los 100€ que le debe de la noche anterior.
La prostituta una
vez recibido los 100€ pasa por el hotel y le paga los 100€ para saldar su deuda
de la noche anterior. El recepcionista recibe así los 100€.
Pero el comercial
recibe una llamada de su empresa diciéndole que la cita con su cliente ha sido
anulada. El comercial va a la recepción y tras una excusa por su intempestiva
anulación le pide los 100€.
De esta manera,
el comercial sale del pueblo con sus 100€ y todas las deudas del pueblo han
sido saldadas.
Bueno, pues esto
es todo para mi pequeño aporte a la causa, que esperamos todos no sea perdida,
en espera de que podamos hacer algo que nos permita al fin cambiar estas
injusticias que hemos terminado por aceptarlas sin rechistar y creer que es lo
que más nos conviene. Cuidado que no se enfaden los de ahí arriba y …